«Judith I» es un óleo sobre tela de 84 x 42 cm pintado en 1901 por el pintor austríaco Gustav Klimt, una obra que representa la madurez artística del autor y está considerada como la primera de su «período dorado», caracterizado por un lenguaje de fuerte abstracción simbólica y el uso de oro como material junto a los pigmentos al óleo.