Dentro de la terminal, los pasajeros adquieren billetes, facturan sus equipajes, y pasan los controles de seguridad. Los edificios que dan acceso directo al avión (a través de puertas) son conocidos comúnmente como sala de embarque. Sin embargo, los términos «terminal» y «sala de embarque» son a veces usados indistintamente, dependiendo de la configuración del aeropuerto.
Los pequeños aeropuertos tienen una terminal mientras que los aeropuertos grandes tienen varias terminales y/o salas de embarque. En los aeropuertos pequeños, el único edificio terminal sirve típicamente todas las funciones de una terminal y una sala de embarque.